9.1.11

Cuando una persona quiere y la otra se deja querer, siempre terminan así, separados.
Sabias palabras de un remissero que nos contaba sus anécdotas después de volver de una fiesta todas de mal humor. Esa frase me llegó mucho, cuando me acosté empecé a dar vueltas por esa simple frase hasta quedarme dormida. ¡Cuanta razón hay en esas palabras y en la charla que tuvimos! Millones de veces nos vamos a caer por esa piedra, hay que hacer siempre lo mejor que podamos, por nuestro bien, pero hay veces que el corazón nos gana y ese es el momento en el que volvemos a chocar, el momento que volvemos a caer con esa piedra, el momento que vuelvo a caer por vos.

No hay comentarios: